Ni el más optimista ucraniano, ni el más pesimista madridista se imaginaron un debut en la Champions League como el que protagonizaron Real Madrid y Shakhtar en la primera fecha del Grupo B.
Las palabras de Zinedine Zidane representaron la reacción del Real Madrid, que salió al segundo tiempo, con una mentalidad opuesta a la pálida imagen que había dejado en el primer tiempo.
El próximo sábado buscará revertir el resultado en su mismo estadio en el clásico de La Liga frente al Barcelona.